Miami, FL, 13 de diciembre de 2024.
Las bebidas fermentadas, como la cerveza, son parte de muchas culturas y ocasiones, pero parece que la mayoría no se detiene a pensar en sus efectos en el organismo.
Isabel Moreno Indias, doctora del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga, citada por El Economista, explica de forma interesante los efectos que trae el consumo de estas bebidas. Aunque el placer de disfrutar una buena cerveza es indiscutible, muchas veces se olvida cuáles son las consecuencias.
¿Qué efectos produce la cerveza en el cuerpo?
La doctora Moreno Indias afirma que el consumo moderado de cerveza puede tener sus beneficios, como mejorar la diversidad bacteriana y la salud intestinal.
Esto se debe a su contenido en polifenoles y fibra que son buenos para la microbiota y pueden mitigar los efectos de un estilo de vida sedentario.
Pero, y aquí viene lo importante, no todas las cervezas son iguales. La concentración de polifenoles y fibra varía, y eso significa que hay que informarse mejor sobre qué tipo de cerveza que se elige.
“La dieta es uno de los factores que más influyen en el perfil de la microbiota, y la diversidad en la composición de la microbiota contribuye al bienestar, además de ayudar a prevenir enfermedades metabólicas como la obesidad y la diabetes”, añade la especialista.
Por su parte, Esther Nova, otra experta del Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos y Nutrición (ICTAN) de España también respalda la idea de consumir bebidas fermentadas de manera moderada para favorecer la salud intestinal.
Pero ¿cuánto es “moderado”? Desde el portal antes citado mencionan que se recomienda que las mujeres limiten su consumo a unos 200-300 mililitros al día y los hombres a unos 400-600 mililitros, siempre y cuando estén en buen estado de salud.
Esta cantidad es suficiente para disfrutar responsablemente y no dejar que una buena costumbre se transforme en un mal hábito.
Fuente: www.eluniverso.com
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